Una mañana de descanso… nos levantamos para desayunar sobre las 8:00h, la familia se despide de nosotros enseñándonos su casa, también nos regalan unas pulseras símbolo de la amistad, nos hacemos fotos y quedamos en enviárselas por email. De camino a Jaisalmer, vamos a visitar los jardines de Mandore, en su dia capital
del reino de Marwar anterior a Johdpur al que se trasladaron por el fuerte de Mehrangarh y la seguridad que ofrecía éste. Son unos jardines llenos de templos y cenotafios de los príncipes, hay muchos estudiantes deambulando, alguno se nos acerca para preguntarnos de donde somos, como nos llamamos y piden que nos hagamos fotos,
caminamos p
or los jardines, que nos ofrecen un frescor necesario por
el calor que hace, observamos muchos monos jugando (ya llevo mi palito, para disuadirlos de que se acerquen) y me pongo a hacer fotos, se aproxima una familia y nos piden hacerles fotos a todos, a cambio debes enseñarsela a tod
os. Continuamos e
l trayecto
para dirigirnos a Osiyan que posee templos jainistas ancestrales, compramos algo de fruta para el viaje, naranjas, manzanas, plátanos por 50 rupias, en el camino paramos varias veces en los pasos a nivel del tren, estos son alucinantes, con la barreras bajadas, van llegando los coches, camiones, camionetas, ricksaw, carretas, motos, bicicletas y van ocupando todos los carriles a ambos lados de la carretera, te empiezas a plantear como vamos a pasar cuando se habrán… pero pasar lo que se dice pasar, pasamos sin problemas, todos arrancan y comienzan a salir como en una carrera, y se forma un embudo en ambos sentidos que permite avanzar de uno en uno mientras los demas se van intercalando como un tetris. En Osiyan se aprecia
mas pobreza, visitamos varios
cenotafios y después entramos a uno de los templos, es gratuito, tiene unas escalera
s con pórticos muy decorados que dan acceso al templo, es espectacular y muy diferente
a los que estamos acostumbrados a ver, lo recorremos tranquilamente y buscamos un sitio a la sombra para comer algo de fruta, a la salida del templo compramos unas pulseras con rudrax para los amigos, visitamos otro templo en est
e se paga y en el que invierten lo que cobran de entrada para restaurar las piezas d
añadas, el tallador nos comenta el significado de las escenas. Continuamos el camino a Jaisalmer y ya se puede apreciar que vamos por el desierto del Thar, no es un desierto como nos imaginamos igual que el sahara, sino que hay matorrales,
árboles y vegetación no muy abundante, de vez en cuando se ven d
unas y pequeñas montañas,
aprovechamos para ver una casa
bisnoi, aunque mahendra nos ha dicho que han perdido la autenticidad debido al turismo y ahora enseñan su casa a cambio de dinero, nosotros queremos probar para regalarles
ropa y cosa que hemos traído, nos enseñan las casas por dentro y todas las dependencias, nos ofrecen chapati y
pipas de sandia, que parece ser que venden en el mercado, también nos ofrecen agua, les ofrecemos la ropa y nos dicen que no la quieren que quieren dinero, ya estábamos avisados, o sea que les dimos 40 Rs que creo que es razonable, luego le piden a mahendra bolis y un peine, nos sienta un poco mal lo de la ropa porque no la quieren ni después de darles el dinero…no lo entendemos. Continuamos y antes de llegar
a Jaisalmer, vamos a pasar por el colegio de la mujer de Mahendra, y así regalarles a los niños los bolis que llevamos, cuando llegamos hay poc
os ni
ños y nos explican que ya ha terminado el cole, o sea que se han quedado unos cuantos para darnos la bienvenida a Jaisalmer, montan un bullicio
entre ellos pero con orden, y nos saludan, se ponen en fila y les damos los bolis, sus caras decían todo… Después nos ofrece la Angina unos frutos como melones pero con sabor a pepino,Me atrevo y
les pido a los niños que escriban su nombre en el
cuaderno de viajes en hindi y les hace ilusión, al rato se marchan andando a sus casas, y nosotros nos dirigimos a Jaisalmer, La llegada no
s deja fascinados con la ciudad, una vez que entramos en el fuerte el sentimiento va aumentando, realmente parece
de cuento, como las mil y una noches, vamos a un hotel para ver habitaciones, nos quedamos con una con baño y buenas vistas por 700Rs, en el hotel siddhartha,
hotelsiddhartha@gmail.com (D
onde la familia nos pareció acogedora y se desvivían por ayudarnos y que la estancia nos resultara placentera, su lema “Un palacio para la felicidad”, seguro que hay mas baratos…),
nos damos una duchita y descansamos un poco, luego paseamos disfrutando del trayecto y maravillados con la ciudad de noche e iluminada, hasta la entrada del fuerte, donde
nos espera Mahendra para ir a cenar a su casa con su hijo Jon, su hija Vinita y su mujer Angina, en el camino, nos comparan cerveza y coca cola para la cena, lleg
amos y nos sentamos en el porche a tomar algo en lo que nos presentamos y charlamos como podemos en ingles, después les damos algunos regalos que les habiamos traído, que nos agradecen mucho, ellos tambien nos tienen regalos...Nos quedamos maravillados. Nos ofrecen comida típica rajasthani, patatas con pimentón, lentejas que pican como su puta madre, arroz con algo parecido a carne pero que es vegetarian, y de postre fideos con leche, parecido al arroz con leche nuestro(delicioso),
después nos quedamos charlando l
argo rato y no sé como, Car acaba en la casa de la vecina haciéndose un tatuaje de henna en la mano y le queda precioso, tras un rato nos lleva mahendra al fuerte para subir al hotel a descansar, los días que viajamos en coche se hacen muy pesados.
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